Una verdadera multitud se congregó este sábado por la tarde para realizar un abrazo simbólico al Hospital Zonal de Bariloche en medio de la crisis que afecta a los trabajadores de la salud.

Pasadas las 17, cientos de personas fueron llegando hasta la entrada del nosocomio por calle Moreno con carlteles y pancartas. No faltaron los redoblantes, los bombos y las trompetas que sonaron al ritmo del épico "muchachos".

Desde allí, y guiados por algunas personas con megáfonos comenzaron a rodear las dos manzanas que ocupa el edificio del Hospital, muchos de ellos tomados de las manos.

El reclamo apuntó directamente al gobierno provincial ante la falta de respuestas a la advertencia de los trabajadores sobre la crítica situación que viven, con salarios que no superan la línea de pobreza y personal que está renunciando en las distintas áreas.

Muchos manifestantes expresaron su repudio a las recientes declaraciones del gobernador Weretilneck, en el que anticipó  que el gobierno va a escuchar y vamos a tratar de brindar respuestas, pero que va a tratar desde el punto de vista salarial a todos los empleados públicos de la provincia de la misma manera”.

“No voy a firmar aumentos salariales que la provincia de Río Negro no pueda pagar. No voy a ser el responsable que la provincia quiebre", advirtió a la vez que les anticipó a los empleados de la Salud que no "No esperen respuestas milagrosas porque no las va a haber”, dijo ayer en un mensaje grabado que se difundió por los canales oficiales del gobierno provincial.

Aún más, el mandatario les sugirió a quienes que puedan conseguir trabajo en el sector privado, que los tomen. (Bariloche Opina)